Lo visitamos cada día, quizás sin darnos cuenta, al abstraernos de la realidad. Cuando pensamos, cuando reflexionamos o simplemente cuando estamos sin hacer nada, tendemos a meditar sobre temas, ya sean banales y sin sentido o temas importantes, y acabamos visitando nuestro interior.
No podemos obligar a nadie a que nos muestre como es su interior y, de igual manera, nadie tiene derecho a robarnos parte de nuestra intimidad. Nuestro interior merece que lo respeten, de igual manera que se merecen nuestro respeto.
Si queréis que os respeten, respetad a los demás...
''Can't find a good reason, can't find hopes to believe''